La cultura del descarte afecta a la mujer al incrementarse el aborto: especialista
Jueves, 19 de marzo de 2015 12:00 hrs
Miriam Apolinar
“A nuestras adolecentes tenemos que darles herramientas y opciones que las enamoren de la vida", exhortó Alejandra Diener, maestra en Ciencias de la Familia, economista, educadora y activista pro-vida.
En el mundo relativista y materialista, los seres humanos están acostumbrados a vivir en busca de la felicidad, no importa el precio que se deba pagar, y mucho menos se piensa en las consecuencias. En el caso del aborto, las mujeres son sometidas a esta práctica sin previa información y orientación psicológica, lo que lleva a todas al mismo camino: la desesperanza, el arrepentimiento e incluso la muerte, explicó para Desde la fe, Alejandra Diener, maestra en Ciencias de la Familia, economista, educadora y activista pro-vida.
“El mundo te convierte en alguien que no eres en realidad, y al tomar decisiones cegadas, terminas dañando tu propia vida. El problema mayor es que actualmente nuestros jóvenes están padeciendo el ‘monstruo’ de la comodidad e irresponsabilidad, debido al pragmatismo que el mundo ofrece, donde tus acciones son respaldadas por tus supuestos derechos y libertades”, expresó Diener.
Cabe destacar que México se encuentra por arriba del promedio mundial en la tasa de abortos en las mujeres de entre 15 y 24 años de edad, según el Colegio Mexicano de Especialistas en Ginecología y Obstetricia. El 44 por ciento de los abortos corresponde a adolescentes de entre 15 y 19 años, en tanto que el porcentaje restante lo ocupan mujeres de 19 a 24 años, aunque también se presenta ligeramente en quienes ya rebasaron esa edad.
Ante esta realidad, especialistas como Alejandra Diener urgen proveer cuidados y medidas de salud para el mejor desarrollo de las jóvenes.
“El gobierno de México ha hecho creer que el aborto es un derecho de la mujer, mientras que la industria farmacéutica incrementa sus recursos económicos a costa de la vida de más de 135 mil bebés que han muerto en la Ciudad de México desde su despenalización en 2007”, expresó la también escritora Diener.
En esta “cultura del descarte” –como la denomina el Papa Francisco– el aborto hace ver a los seres humanos como objetos innecesarios e inservibles, ya que son desechados sin tomar en cuenta sus derechos desde la concepción, tan solo por ser física y socialmente más débiles. Ante esto, la mujer se ve sujeta a opiniones e ideologías que le impiden desarrollar una de las muchas misiones para la cual fue creada por Dios: la de dar vida.
“A nuestras adolecentes tenemos que darles herramientas y opciones que las enamoren de la vida, ya que muchas jovencitas piensan que tener relaciones sexuales significa amar y ser amadas, pero el objetivo es hacerles saber que cuidar su sexualidad es un regalo único y personal”, aseguró la también escritora y comunicadora.
La autora del libro El monstruo de la comodidad explica que el aborto es un tema no sólo de agenda pública, sino un compromiso y lucha de la sociedad civil, que debe emprenderse junto a organismos e instituciones como la Iglesia Católica para unirse y levantar la voz de los más desprotegidos.
“La solución nunca será la muerte, sino la vida; tenemos que enfrentar los problemas y ser responsables, empezar como padres de familia a darle confianza a nuestros hijos y responder a sus dudas y preguntas. No evadir nuestra responsabilidad en este sentido, pues esto provoca que los niños las busquen en la escuela, en la televisión o con la amiga”, advirtió.
Además, expresó que una cultura que rechaza al otro, que pretende acabar con el don de la vida y vetar la voluntad de Dios, destruye los vínculos más íntimos y auténticos del ser humano, y termina por deshacer y disgregar toda la sociedad y generar violencia y muerte.
“El ser humano se convierte en esclavo, ya sea de las modas, del poder, del dinero, incluso de su propio cuerpo, por eso debemos reaccionar con nuestros jóvenes para que no caigan en estas alternativas que les prometen una vana y temporal felicidad, en un monstruo de la comodidad”, sentenció Diener.
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